jueves, 15 de octubre de 2009

astromulo maní-fiesta

los amigos de la editorial astromulo me piden que les redacte un manifiesto. cosa difícil y simple a la vez. por un lado, difícil porque deberían ser ellos mismos los que redactaran el manifiesto, y simple porque soy una persona muy aficionada a los manifiestos. ya he pertenecido a 8 coma 3 grupos literarios neo-neo-posvanguardistas. me queda de esa invalorable etapa de mi vida el aburrimiento y la afición a los manifiestos ya manifestada antes. de todas formas, accedí al encargo, aunque debo reconocer que me ofrecieron cuatro pesos por línea, lo cual me pareció un acuerdo más que satisfactorio. he aquí entonces el susodicho manifiesto del mulo o del mulismo:

1. el mulo ha sido, tradicionalmente, un animal asociado a la ignorancia, a la falta de conocimiento, a la burreza, en una palabra. es un símbolo de lo brusco, de lo tosco, lo que no tiene refinamiento. pero, también, es un animal asociado a la fuerza, aunque tiene cierta connotación negativa hacia la esclavitud y el servilismo. por eso nos gusta, porque es un símbolo antipático, nadie lo elegiría para una heráldica de su ética. nosotros sí. es que tenemos predilección por el vilipendiado. y el mulo lo es, ciertamente.

2. aun así, nos encaprichamos en ver en él la potencia del que se hace a sí mismo; aunque otros crean que sigue la zanahoria, en realidad el mulo quiere comer. es torpe, pero digno. es un híbrido, y eso lo hace un parricida inconsciente. además, su ignorancia es un valor positivo frente al potro salvaje que, no obstante, posa para la foto en el escudo nacional, arreglándose el jopo como un tordillo de pacotilla.

3. y hay más: el mulo tiene una connotación sexual. nosotros la leemos como un símbolo de lo instintivo, de lo irracional, del gobierno de la pasiones. el ser solamente gobernado por la intuición y la pasión. fuerte y elemental. temperamental e impulsivo. todo vida y acción, dando coces para todos los costados. y más. a los niños, en la escuela de antes, se les ponía orejas de burro (hoy se pueden ver en las vitrinas del museo pedagógico) cuando no hacían lo que se le ordenaba. no hay rosa, león, águila, corcel, ballena ni mojarrita que simbolice una rebeldía tan simpática.

4. nosotros somos mulos. queremos ser ese mulo sin muletas que ande rebuznando por ahí, dando patadas a los pelotudos que se creen liebres porque saben quién es aquiles, pero ignoran por qué el mulo tiene la pija tan grande: es que le sobran las pelotas para no ser la paloma pedorra que todo el mundo espera en el balcón de su mísera existencia, sin entender que ese sorete de mulo que amanece cada día en su puerta es el orzuelo en el ojo de un mundo que huele más que a mierda.

nestor bisogni

1 comentario:

pirulo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.